"La Carmelita es bien calladita, bien tímida, nunca dice nada, sonríe no más, saluda y sonríe, cocina y sonríe, sirve y sonríe. Hoy día mientras hacía el aseo en la pieza de al lado escuché un golpe. Después silencio. Y después una risita -inaudible casi- en el baño: 'señora Bertita, me caí"
Claudio Bertoni
Rápido, antes de llorar. Cuadernos 1976 - 1978.